El estelar de Caribes de Anzoátegüi, Alex Herrera, se mantiene a tono gracias a la Lnnb |
Se ha comenzado a notar el interés
ciudadano por saber un tanto más de la Liga Nacional Bolivariana de Béisbol, a
pesar de que transcurre ahora mismo su novena temporada como béisbol
organizado. Aunque precisamente, la organización no ha sido el fuerte de esta
liga, porque muy poco se sabe de ella.
Como toda liga deportiva de béisbol
amateur, los primeros cinco años son de ensayo y error, y luego ir sobre la
marcha. La creación directa de la liga se debió al ideal del ex-presidente Hugo
Chávez, y el “capricho” (como tildó la mayoría de la opinión pública en el
2005) por apoyar el talento venezolano fomentando una competitiva liga del
deporte nacional que para este año cuenta con la participación de 23 equipos
extendidos por 21 estados del país.
La etiqueta de béisbol amateur hay
que revisarla con lupa por la cantidad de peloteros experimentados y con
ranking profesional que actúan en esta liga socialista. “La Liga está ruda”, comentó
Isaac Vargas, estelar lanzador de Estudiantes de UCV y que desde hace tres años
dejó de formar parte del roster de Bravos de Atlanta en la Liga Dominicana de
Verano.
Si revisamos rápidamente los
rosters nos encontraremos nombres muy conocidos, como: Robert Pérez, Orber
Moreno, Winkleman González, Luis Landaeta, Ugueth Urbina (todos fichados por
Petroleros de Barinas), Juan Carlos Ovalles, Eduardo Charallave Ríos (Miranda),
entre otros. Es una Liga que poco a poco capta más el interés de peloteros
experimentados o releases -jugadores que estuvieron en el béisbol organizado
dentro de MLB- por la fecha estratégica en la que se realiza, comienza a
principios de junio y culmina durante la segunda quincena de septiembre. Eso
significa que, si se tiene una destacada actuación las posibilidades de firmar
con un equipo de Lvbp -que comienza en la primera quincena de octubre- son
reales.
Orber Moreno y Robert Pérez comparten equipo en Barinas y luego se rivalizan en la Lvbp |
La Lnnb actúa los fines de semana,
a los jugadores se les cancelan viáticos por jugar y, generalmente, los equipos
les ofrecen la comida correspondiente al finalizar los encuentros que en su
mayoría son desde el medio día. Económicamente, es una liga muy básica y débil;
el principal patrocinante es Pdvsa y las gobernaciones que asignan ciertos
recursos a sus equipos representantes.
En el ramo comunicacional la liga
ha fallado. La publicidad no le corresponde al buen béisbol que es capaz de
brindar, ni siquiera regionalmente tiene impacto. Pero, para esta novena
edición se efectuaron innegables ajustes y acuerdos. Meridiano Televisión mostró interés y propuso establecer en su parrilla
sabatina un encuentro bolivariano. Telellano,
canal regional de Barinas, también suma sus cámaras para los cotejos.
El formato de esta liga hace que
sea menospreciada, el nivel es bueno pero proyecta a que explote lento.
Inversionistas privados tendrían que inyectar una buena cantidad monetaria para
ver resultados en dos días cada semana que son los juegos. La Nacional, como
también se le conoce, aplica sin contratos pero donde ofrezcan mayores “viáticos”
los peloteros de mayor calidad llegarán tal imantación.
La posibilidad de que en Venezuela
haya béisbol de calidad durante todo el año existe, obviamente, el nivel de la
Lvbp será el timonel. Pero pudiese ser interesante que ambas ligas trabajen en
mancomunidad para extender la actividad, mas no el negocio del béisbol.
SH.
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